Breve historia de COPARMEX
a Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX) es un sindicato patronal de afiliación voluntaria, que aglutina empresarios de todos los sectores, que buscan mediante ella su representación en el ámbito laboral y social. De la libre afiliación de poco más de 36 mi socios, se desprende de su independencia, su fuerza y su autoridad moral.
La COPARMEX nace el 26 Septiembre de 1929, por su iniciativa del industrial regiomontano Don Luis G. Sada, quien en la Convención de Delegaciones Industriales de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio e Industria, dio a conocer su idea de formar una organización distinta a las Cámaras constituidas por disposición Legal.
El trabajo integral de la COPARMEX ha influido en la adopción, por parte del gobierno, de políticas más acorde al pensamiento empresarial y posibilitado la creación de otras organizaciones, como son por ejemplo: el Consejo Nacional Agropecuario: CNA; el Instituto de Proposiciones Estratégicas: IPE; La Comisión de Educación del Sector Empresarial: CESE: Consejo Empresarial de la Inversión y Desarrollo del Sureste: CEIDES; la Fundación para el Desarrollo Sostenible en México: FUNDES y Sistema de Desarrollo Empresarial Mexicano: DESEM.
Historia en Sinaloa
A medio siglo de su fundación, el Centro Empresarial de Sinaloa, sigue conservando su ideario fundamental como coordinador y conciliador de los intereses particulares de todos los sectores, asumiendo siempre las funciones de servicio y representatividad del sector patronal.
Fundado bajo el entusiasmo de un grupo de sinaloenses con clara visión futurista, encabezado por Don Pedro Guajardo, en asamblea celebrada, el 9 de agosto de 1955, en el Centro Dermatológico de Culiacán, Sinaloa.
Constituido conforme al artículo 123 de la Constitución política del país y en la Ley Federal del Trabajo, como sindicato de empresarios, logra el reconocimiento de las autoridades correspondientes, nace totalmente independiente y sin compromisos, políticos, religiosos o de otra índole.
Sin espíritu de lucro y de afiliación voluntaria, caracterizándolo la universalidad de sus socios, agrupando a toda clase de empresarios cualquiera que sea su actividad especifica.
Como consecuencia de su naturaleza eminentemente privada, en el Centro Empresarial de Sinaloa no tiene otras limitaciones mas que las que establecen sus propios estatutos y las que emanan de su Asamblea General y del Consejo Directivo.